lunes, 26 de enero de 2009

Yantar a chirla come


Todo comenzó sobre las dos de la tarde. No es la hora de toros, sino la de yantar. Allí llegué via metro, precedido por Spanjaard, nervioso por lo que podría pasar y por con quienes me iba a encontrar. Llegue, manoseé, bese (a las señoras, por supuesto) y conocí a D. Manolo, del que saqué tan buena impresión, que apunto estuve de faltarle al respeto.

Nos sentamos en nuestros sitios marcados por letreritos de PVC (cómo en las bodas de postín). Me colocaron frente a Antoñito y su señora esposa (muy guapa, por cierto), y junto a Sergio (a mi derecha como el buen apóstol) y Spanjaard (a mi izquierda como el buen ladrón). Un poquito más alejada, a mi siniestra derecha, estaba la señora de Don Iñaki, también muy guapa, y gente de bien como es la gente de Bilbao. A su lado estaba su señor esposo. Un  poquito más escorada estaba Patricia, un bombón juvenil. Enfrente, al lado de la guapa esposa de D. Antoñito se sentó “¡Viva Honduras!”. Presidía la mesa D. Manolo. También acudieron el Sr. Smg10 y su esposa, el señor Huang-Ho (Juanjo para los amigos), Popeyesmit , Malatesta y el Señor Pericles con quién charlé amigablemente al final de la jornada. Don Joaquim llegó tarde por culpa del temporal, del AVE y las malas lenguas dicen que también por culpa de Malena.

El yantar sucedió pausadamente entre platos de croquetas, jamón, cecina (exquisita), ensaladilla rusa (buenísima), gambas con gabardina (se la quitaron a los ex-pías de Grana-os) y algún que otro manjar que, aún siendo bueno, no dejó recuerdo en mi corto cerebro.

Los caldos, excelentes. Dice que hasta hubo vino de mi tierra. Vino que no probé (debieron pensar que ya estaba acostumbrado a beber de la Ribera del Duero). Probé Riojas, Albariños, de León, Cava catalán (de color rojizo) buenísimo, vino dulce y hasta Pedro Ximenez. Todos ellos, sin ánimo de ser pelota, los mejores caldos que he probado en mi vida. Yo no suelo adorar a Baco, es decir que nunca bebo, pero este día me puse hasta las trancas, con la peculiaridad de que, el vino debía de ser tan estupendo, que no se me subió a la chaveta.

Charlamos amigablemente de varias cosas, incluida la política.

Una vez finalizada la exhibición de viandas y caldos, nos retiramos como tertulianos intelectuales a un café de los del Madrid de siempre dónde aplacamos la sed con tónicas, Fabra-colas y combinados varios (mojitos, por ejemplo). Tras varias llamadas telefónicas de las impacientes contrarias, nos disolvimos cuan manifestación y volvimos a dónde nos dio la gana.

Todos, salvo un servidor, son gente maravillosa, de espíritu jovial y juventud eterna. Gente de la que aprendemos día a día y a la que no me importaría volver a ver.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

La foto parece hecha de estranjis con cámara oculta, ¡tal como si la hubiera tomado un mortadelo de doña Espe!.

Un saludote.

Joaquim

Anónimo dijo...

Salu2 aquí también "pañeros"

Anónimo dijo...

¿Y dónde coños está aquí la poesía? ¿Esto no es un blog de poesía?

Y no vale eso de 'poesía eres tu'. Jejejeje.

SPJ

antoñito dijo...

me s´abren las cannes.

Anónimo dijo...

Gracias Celemín por la reseña del Oh menage.
Me voy haciendo una idea de cómo
disipais algunos un día, so pecadores.

(Qué envidia cony!)

Un saludo.

Anónimo dijo...

Me alegro de que pasarais un buen rato charlando, comiendo, bebiendo (esos caldos). Yo seguiré perteneciendo a esa lista de voyeurs de Manolo y contertulios, soy tímida y hablar de política me da pereza.Salud

Celemin dijo...

Gracias a todos. Tengo fotos alo más grandes. Si queréis, las pongo.

Salud y forza al canut!

Anónimo dijo...

Celemin, soy luchino, me alegro por vosotros, lamento no haber estado, y mas despues de ver las fotos ( pon más, porfa ), espero acudir a la proxima.